El Centro de Memorias Orales (CMO) del Banco de la República es un proyecto que inició en 2015 con el fin de recolectar y dar a conocer la memoria de diversas comunidades del país. Su objetivo final es la construcción de identidades ciudadanas que sean incluyentes y den cuenta del complejo tejido social de Colombia; de ahí que se invite a los ciudadanos a compartir sus recuerdos particulares para, de este modo, reconstruir aspectos básicos de las regiones de Colombia.
Este proyecto surgió con el fin de cumplir con tres metas específicas: la valorización de los bienes comunes de los ciudadanos, es decir, los que no siguen una lógica del mercado sino que permanecen anclados a la sociedades locales; la activación de archivos vivos o acervos en constante cambio que se alimentan de testimonios, saberes y conocimientos reinterpretados a partir del diálogo y las interacciones sociales; y finalmente, la construcción de ciudadanías incluyentes, a partir de las cuales se busca fomentar la creación de espacios para la construcción colectiva del conocimiento desde la cultura, la valorización de los testimonios personales y los diferentes puntos de vista que existen sobre temas similares. Para conocer sobre la organización, metodología y desarrollo del proyecto, puede consultarse su sitio web.
A la fecha, esta iniciativa cuenta con aproximadamente 50 grabaciones de habitantes de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, en donde se dio inicio al proyecto, en las que narran sus historias de vida y expresan el valor patrimonial de su cultura a través de cuentos, cantos, relatos, expresiones corporales y prácticas cotidianas.
El Centro de Memorias Orales contiene una vasta documentación que se conserva en formatos digitales (DVD y USB) y bajo diferentes signaturas, en la Sala de Artes y Humanidades de la Biblioteca Luis Ángel Arango y la Sala General del Centro Cultural de San Andrés. Igualmente, una copia de estos testimonios está disponible para su consulta en la Biblioteca Virtual del Banco de la República. Además de las grabaciones orales, es posible consultar videoclips realizados por quienes brindan sus testimonios, fichas descriptivas en las que aparecen detalles de los relatos, fotografías a color de las familias que participaron en el proyecto, así como tutoriales de cómo realizar aportes a esta iniciativa; pues con el fin de fortalecer la colección, el Banco de la República dispuso en el Centro Cultural de San Andrés, Providencia y Santa Catalina una Sala de creación para que los usuarios puedan compartir, grabar y editar sus propias memorias.
Los relatos, testimonios e historias de vida aquí conservados, dan cuenta de las vivencias diarias de los habitantes de la isla, sus rutinas de trabajo y los mecanismos utilizados para la producción agrícola y pesquera, apuntes sobre historias familiares, como la llegada de sus antecesores a San Andrés y la construcción de sus hogares; elementos que recuerdan de su infancia, como los juegos y deportes que practicaban, actividades a las que se dedican los niños y jóvenes hoy en día, problemáticas y oportunidades de acceso laboral y educativo con las que cuentan en la región, actividades deportivas que practican y las costumbres y celebraciones típicas de la isla, entre otros.
Como antecedente a este proyecto, en el año 2002, la investigadora Claudia Leipold, recopiló una serie de entrevistas a partir de las cuales buscó dar a conocer las trayectorias de vida de los sanandresanos, en las que se narran aspectos relacionados con la cultura y las instituciones sociales de mayor tradición en la isla (como la iglesia, la casa de la cultura y otras congregaciones); así como la identidad de los nativos durante la década de 1990. Las voces de artistas, pastores bautistas, gestores culturales y adultos mayores, que se compilan en el trabajo de Leipold, dan cuenta de anécdotas y recuerdos que permiten conocer pormenores de la forma de vida de los isleños, relatos colectivos que presentan la diversidad propia de la idiosincrasia raizal. El trabajo de Leipold titulado “Our Native Thing. Estudio sobre la imagen histórica de los sanandresanos en el mar Caribe colombiano”, es el resultado de sus estudios doctorales en historia y filosofía en la Universität de Marburg (Alemania); y a partir de ellos analiza los procesos históricos que sustentan la imagen de los isleños a través de una perspectiva etnohistórica.
Tanto la investigación de Leipold, como el proyecto adelantado por el Banco de la República, permiten reconstruir la memoria de los raizales y el diálogo intergeneracional. A partir de la divulgación de registros sonoros en donde los adultos mayores comentan sobre cómo han experimentado los cambios inherentes al paso del tiempo y la mundialización en la isla, se dinamizan los procesos de memoria oral y reflexión sobre el pasado histórico. Así, los jóvenes isleños pueden adquirir nuevas perspectivas sobre el patrimonio inmaterial y de esta manera, apropiarse de sus antepasados, recuperar las nociones básicas de quiénes han sido y conocer los objetos, prácticas y saberes que los distinguen.
Finalmente, la documentación y las grabaciones aquí contenidas, constituyen una fuente de riqueza investigativa en la medida en que permiten difundir y dar a conocer los conocimientos locales de los habitantes de regiones que, en aspectos políticos, sociales y culturales, permanecen aislados de las dinámicas que se llevan a cabo desde el centro del país. De este modo, el valor de estos testimonios orales responde a la necesidad de entender y asimilar particularidades de las culturas en Colombia que, como miembros del mismo país, debemos valorar.
Texto redactado por Juan Sebastián Ariza Martínez y Laura Marcela Moreno Berrío